Hay quien piensa que
Rise Against ya es incapaz de hacer nada bueno al haber abrazado completamente el éxito comercial con discos cada vez más alejados del potentísimo hardcore-punk de sus inicios. Bueno, tal vez tras escuchar The Black Market cambien un poco de idea porque estamos ante un disco mucho más redondo que su predecesor.
A pesar de la evolución progresivamente más melódica que ha seguido la banda desde su formación en 1999 (hasta llegar al sonido perfectamente consolidado de este álbum), no se puede decir que se aprecie una falta de energía. The Black Market tiene más agallas que el cómodo y continuista Endgame, y contiene canciones muy a la altura de los mejores temas de Appeal To Reason e incluso The Sufferer and The Witness. Hablo principalmente de “The Eco-Terrorist In Me” (una de las pocas ocasiones en las que Tim se permite desgarrar la voz como antaño) y “Zero Visibility”. ¿El problema? Que otras suenan menos inspiradas y más blandas, con unos coros y melodías tan prototípicamente
Rise Against que llegan a resultar aburridas.
Sin embargo, el disco tiene muy buenos momentos. Quizás una de las novedades más interesantes sean los nuevos caminos líricos que exploran, tratando temas más introspectivos e intimistas, lo que da un gran poso de madurez a las letras. Musicalmente, parece que han buscado la fórmula de la variedad para cuadrar el álbum, mostrando de primeras la capa más potente con “The Great Die-Off”, pasando por un registro de influencias más pop en “Tragedy + Time”, dejando por el camino una composición bastante personal en “Methadone” y casi acabando con el lado acústico de “People Live Here”. Se aprecia la intención creativa, aunque no todo funcione como debería en cuanto a calidad y regularidad.
Así que no vamos a decir que esto sea un super-discazo, porque no lo es. Pero tampoco vamos a decir que es un desastre, porque ni de broma. Quien quiera seguir criticándolos de forma imparable, simplemente porque son uno de esos grupos aclamados a nivel internacional, adelante. Pero en realidad The Black Market es una demostración de fuerza frente a los que cayeron en el error de enterrarlos antes de tiempo. Es cierto que hace años que han bajado las revoluciones y la agresividad a la hora de componer, pero como banda de rock han logrado un equilibrio más que respetable. Tal vez ingresando en ese selecto grupo de veteranos con pocas ganas de arriesgar, pero con sobrada experiencia para seguir dejándonos varios temazos marca de la casa en cada disco. Que no es poco.