Llega un momento en que la gran mayoría de grupos que son capaces de construir una trayectoria estable a través de los años se dan cuenta de que tienen la oportunidad de celebrarlo, y deciden sacar un CD/DVD en directo, algún pack especial para los fans, colección de rarezas o, como en este caso, discos recopilatorios. Los más de veinte años de
Anti-Flag bien merecen este lujo.
En este sentido A Document Of Dissent cumple totalmente su cometido abarcando la carrera de la banda y lo hace, además, de forma cronológica. Empezando por los primeros años de Die For The Government hasta el 2013 con el reciente The General Strike, se van sucediendo todos los singles y canciones más exitosas entre los fans del grupo. “Fuck Police Brutality”, “Spaz’s House Destruction Party”, “Turncoat”, “You Can Kill The Protester, But You Can’t Kill The Protest”, “The Press Corpse”, “Good And Ready”, “The Economy Is Suffering... Let It Die”, “Broken Bones”… Seguro que habrá quien eche en falta alguna que otra canción, pero en general es un compendio bastante acertado de los temas más representativos de
Anti-Flag.
Por ello, es fácil para cualquiera que desconozca las virtudes de este grupo adentrarse en su discografía sólo escuchando este álbum. El sonido básico es este, un estilo muy influenciado por bandas de corte más clásico como
The Clash , pero al mismo tiempo, con estribillos muy efectivos y melódicos, que los convierten en un grupo respetado tanto por fans del punk más purista, como por los próximos a la vertiente más pop-punk y melódica. Si no los conoces, es un buen momento para darles una oportunidad.
A Document Of Dissent: 1993-2013 es, a grandes rasgos, una colección para los fans.
Anti-Flag conmemora 20 años de música reuniendo 26 de sus temas más míticos, tras nueve discos de estudio y el paso por seis discográficas diferentes. Además, recoge en el librillo anécdotas de la banda y su historia en conciertos a lo largo del mundo, así como ilustraciones y eventos que los han inspirado a la hora de componer. Está bien si eres uno de esos seguidores que necesitan comprar cada nuevo material de su grupo favorito.