Cuando uno, a veces, se para a pensar en los orígenes de alguna de esas bandas que, en un período no demasiado extenso de tiempo, alcanza cotas de popularidad, éxito y fama verdaderamente impresionantes; la sensación más aproximada a lo que se siente es el vértigo. Muchas veces ocurre que la banda que conocemos en la actualidad, no tiene casi nada que ver con la banda que comenzaba en esto de la música hace diez, quince, veinte o treinta años. Fíjate, si no, en la tremente evolución que han experimentado grupos como
blink-182 ,
Green Day , o los mismísimos
Avenged Sevenfold , sin ir más lejos. Sí, es cierto que en álbumes como éste, “Waking The Fallen”-su segundo disco de estudio, que este año cumple su décimo aniversario-, encontramos, en esencia, algunas de las bases e influencias que continúan vigentes en sus dos últimas entregas, “Nightmare” y “Hail To The King”: el metal de bandas como
Metallica (dinos si M. Shadows no suena como el señor Hetfield en “Unholy Confessions”), el heavy metal, el screamo, el metalcore y cierto toque progresivo.
Y si al final “Waking The Fallen” no es tan distinto de sus últimas entregas, ¿qué tiene de especial? Bueno, filias y fobias al margen, porque fue el disco que sentó las bases de lo que son ahora, tanto en forma como en contenido, ejerciendo de piedra angular sobre la que construyeron, en los años sucesivos, su característico sonido. Eso, por no mencionar que se encuentra entre uno de los LPs favoritos de sus seguidores. Así pues, con esta reedición, “Waking The Fallen: Resurrected”, la banda pretende llevar a cabo una suerte de tributo a este importante disco en su discografía, aportando, además del LP original tal cual se registró, algunos extras que harán las delicias de sus seguidores. Y para ello han decidido incluir un total de once cortes inéditos hasta el momento, incluyendo en ellos dos nuevos temas, de entre los que destaca el que da nombre al disco, una canción que acabó desmembrada en diferentes partes que aparecieron de un modo distinto en sucesivas entregas discográficas; cuatro demos que no habían visto la luz hasta el momento, grabadas con la participación Teppei Teranishi en la guitarra (guitarrista de
Thrice ), que muestran diferencias notables en las letras y en algunas melodías; y cinco versiones en directo grabadas en 2004 de temas como “Chapter Four” o “Desecrate Through Reverence”. Quizá lo más jugoso sean las demos, ya que ofrecen un pequeño atisbo de lo que vendría a ser el proceso creativo de
Avenged Sevenfold , pudiendo observar cómo acabaron evolucionando esos mismos temas, algo que siempre resulta curioso, además de contar con Teppei de
Thrice , todo un lujo.
Por otro lado, en el apartado videográfico, se incluye un minidocumental de unos 30 minutos de duración, a través del cual, la banda hace un ejercicio de retrospección acerca del proceso de composición, maquetación, grabación y gira de “Waking The Fallen”; incluyéndose, además, tomas extraídas de cintas y grabaciones caseras de los miembros de la banda. En este mismo apartado también se incluye una primera versión del cideoclip de “Unholy Confessions”, algo curioso para los fans, pero anecdótico para el oyente casual de la banda.
En definitiva, se trata de una reedición que, sin ser algo excesivamente espectacular, ya que el disco orignal no ha sido, siquiera, remasterizado, contiene material suficiente como para que los fans de la banda encuentren en ella un elemento de atracción suficiente para su adquisición, destacando las demos registradas con la participación de Teppei Teranishi, y el minidocumental de 30 minutos que, sin ser tampoco algo espectacular, ofrece interesantes vistazos a distintas épocas de la banda incluyendo, cómo no, algunas de las últimas apariciones de The Rev antes de su fallecimiento.
Sin duda, un curioso vistazo a uno de los discos más relevantes de su carrera.