Habiendo escuchado ya algunos trabajos provenientes de dos de los miembros de
My Chemical Romance , uno podría intuir que la separación del grupo tiene como telón de fondo unas más que probables diferencias artísticas; porque mientras
Frank Iero se ha destapado como un artista metido de lleno en el sonido lo-fi del punkrock de corte más moderno -¿post-moderno, podríamos decir?-,
Gerard Way exhibe una propuesta que difiere sensiblemente de la de su compañero, y que se muestra, lógicamente, distinta a la de su grupo de origen. No obstante, con “Hesitan Alien”, que así se titula el LP de Gerard, los fans de
My Chemical Romance van a encontrar más puntos en común con el último trabajo de la banda “Danger Days: The True Lives Of THe Fabulous Killjoys”, que si lo comparamos al disco debut de Iero; aunque el gran quid de la cuestión aquí, es el poder observar cómo Gerard ha sido capaz de haber creado un disco 100% suyo, libre de cualquier atadura. Al fin.
Como ya hemos insinuado, no, no es que “Hesitant Alien” sea una continuación, apéndice o trabajo paralelo a “Danger Days”, ni mucho menos, pero desde luego, y de un modo bastante evidente, existen muchos puntos en común con la propuesta que
My Chemical Romance pretendió presentar en sociedad en aquél LP. No obstante, y como bien se ha ido apuntando a lo largo de las semanas previas a su lanzamiento, “Hesitant Alien” tiene algo más de chicha que ofrecer. Claro que, cuando conoces el contexto en el que la mayor parte de temas de este disco fueron compuestos, entiendes un poco mejor su esencia.
Gerard Way , durante la época en la que
My Chemical Romance estaba componiendo “Danger Days”, se encontraba escribiendo algunas canciones para sí mismo; temas que, en algún momento, fueron referenciados en diversas entrevistas pero que, probablemente entonces, nadie sospechaba que iban a ser publicados de este modo. Quizá era como una forma de escapar de lo que suponía componer y compartir canciones con su banda madre, dando plena libertad a sus influencias y expectativas como compositor. Y lo cierto es que en ellas se percibe algunas de esas referencias que, de algún modo, ha ido dejando caer en multitud de entrevistas. Salvando las distancias, parece claro que Gerard se ha inspirado en el post-punk, el glam-rock y el brit-pop para componer “Hesitant Alien”. No es que vaya a sonar como lo hacen los Oasis del “Definitely Maybe” –ni, por supuesto, como
David Bowie -, obviamente, pero si estás familiarizado con el trabajo de las bandas de aquella época y, remontándonos un poco en el tiempo, a los sonidos que vinieron tras la desaparición de Joy Division o Happy Mondays, podrás hacerte una idea del tipo de sonido que Gerard parece estar buscando y potenciando de un modo deliberado.
Así, por ejemplo, apreciarás un interesante predominio de las distorsiones más sucias y fuzz, además de los filtros y ecualizaciones sobre su voz, que le dan ese toque lo-fi a los temas. Nos estamos refiriendo a cortes como “Zero Zero”, “Action Cat” o “Juarez”, que son algunas de las mejores canciones del disco. Por otro lado, hay algunas composiciones de corte eminentemente más melódico, como “No Control” o “Drugstore Perfume”, otra de las sorpresas del álbum.
En esencia, se percibe una especie de liberación de Gerard como compositor con respecto al corsé que debía suponerle componer para
My Chemical Romance. De hecho, su interpretación muestra aquí diferentes aproximaciones, nuevos registros y, sobre todo, la ausencia de una dramatización exagerada o excesivamente apurada. “Hesitant Alien” supone así un cambio sustancial en registro, aproximación sonora y estética global del conjunto con respecto al
Gerard Way que conocíamos hasta ahora. Se muestra aquí mucho más metido en su propio universo, alejado de la imaginería general que predominó en su anterior grupo, lo cual le hace sonar y verse totalmente renovado, alejado de viejos clichés y situado bajo un nuevo foco que, sin duda, ofrece una perspectiva totalmente distinta. Una reinvención en toda regla.