Estos días de cuarentena dan mucho tiempo para dedicarse a cosas que quizás en circunstancias normales uno no sacaría tantos ratos.
Repasando el basto catálogo de Spotify, hay que decir que encontrar referencias de una banda tan desaparecida como
Fenix TX da mucha alegría.
El disco debut de esta banda de Punk Pop originarios de Houston, Texas, en realidad es una reedición, ya que la primera grabación y publicación de este disco fue con el sello Drive-Thru, quien lo lanzó bajo el nombre de Riverfenix (el nombre original de la banda). Tiempo después acabarían cambiándolo por el actual
Fenix TX debido a problemas legales.
Este primer disco llamó mucho la atención de Mark Hoppus de Blink 182, quien se convirtió en su mánager para intentar larzar la carrera de la banda. Blink 182 les llevaron de gira en 1999 pero al crecer tanto la popularidad de Blink, Mark tenía poco tiempo para ocuparse de la banda y decidió dejar la representación del grupo en manos de Rick Devoe, mánager de blink 182.
El empeño de Hoppus por impulsarles hizo que MCA records fichara a
Fenix Tx.
La banda lanzó con MCA su disco debut regrabado, esta vez como
Fenix Tx y no como Riverfenix, y también su segundo Lp, “Lechuza” en 2001.
La banda, pese a no ser demasiado conocida en este lado del atlántico, en Estados Unidos se convirtió en una pequeña banda de culto dentro de la escena Punk Pop consiguiendo vender 600.000 discos entre sus dos publicaciones.
Tiempo después, problemas internos entre los miembros del grupo sobre distintas opiniones de cómo debería sonar la banda hicieron que el grupo se disolviera en septiembre del 2002.
En 2016 saltaba la noticia de su vuelta al publicar la banda el Ep
Creeper que comentaremos pronto.
Centrándonos en el disco, hay que decir que su sonido tiene todas las características del género, canciones alegres y pegadizas con riffs dulzones y letras sobre amores e inquietudes de juventud.
Temas como Flight 601, Ben, Speechless y la mejor del disco, All My Fault, son canciones que te alegrarán el día y provocaran que muevas la cabeza sin darte cuenta.
Tengo que decir que siempre me llamó la atención la voz de su cantante Will Salazar, que sin ser nada del otro mundo tiene una textura y un tono especial.
La producción del disco es básica, correcta sin más, algo que mejorarían con su siguiente publicación, “Lechuza”.
Si estás aburrido sin saber qué hacer estos días y quieres recordar aquellos maravillosos años donde las cosas no eran tan complicadas y las responsabilidades no eran tantas como ahora, permítete dar un repaso a
Fenix Tx y verás como lo disfrutas.
Y si no los conocías de antes, igualmente escúchalos. No te van a volar la cabeza pero sí que te harán pasar un buen rato.