Difícil lo tenia
Rise Against después de publicar auténticos “masterpieces” como ‘Revolutions Per Minute’ o ‘The Unravelling’ si quería volver a dar el pelotazo como lo dio con semejantes grabaciones, pero esta vez se han aproximado mucho, volviendo a dejar buen sabor de boca. Tal vez no del mismo modo que con ‘RPM’ o ‘The Unravelling’, pero desde luego de una forma (otra vez) impresionante tras la pequeña decepción que para muchos supuso el ‘Siren Song Of The Counter-Culture’. Hablamos, como es lógico, de ‘The Sufferer and The Witness’, el nuevo lanzamiento de
Rise Against.
Se trata de un disco, a priori, menos agresivo que sus dos más exitosos, pero sin ninguna duda tan inspirado musical y líricamente, o más, que estos. Desde luego no es un disco que deje indiferente. El grupo traza sus canciones a través de melodías algo melancólicas y con puntos de agresividad interesantes, además acertadísimos y potentes riffs de guitarra acompañan a la voz desgarrada de Tim. Por mucho que algunos digan, no falta tanta energía como creen. Desde luego, hacía tiempo que no escuchaba un inicio de disco tan acertado y potente como en este, con dos canciones que probablemente sean de las mejores del disco: ‘Chamber The Cartridge’ e ‘Injection’, sin menospreciar, desde luego, a temas como ‘Bricks’, ‘Ready To Fall’, ‘Drones’, ‘Worth Dying For’ e incluso la bonita balada ‘Roadside’, en la que aparece una voz femenina que conjuntada con la de Tim crean una atmósfera increíble.
En resumen, esperado y no creo que decepcionante disco de
Rise Against. En mi opinión, tal vez sea el disco más inspirado, y aunque en principio suene menos agresivo, tenemos un discazo delante de nosotros.