El primer LP de
Sleepaway , publicado en 2006, me suena.
Y me suena porque además de tener influencias de
Jimmy Eat World , de Get Up Kidso de
Mae (algunos son capaces de comparar a estas dos históricas bandas con la que ahora nos ocupa), suena muy noventero, rock a lo Goo Goo Dolls.
Hoy en día es muy complicado descubrir un sonido nuevo, algo que consiga sorprender e impresionar a la vez. Y desde luego esta banda no va a hacer que os sintáis ni sorprendidos, ni impresionados. Ni siquiera os va a provocar un balanceo de flequillo. Pero es un disco correcto. No quiero provocar el rechazo de este grupo y todo lo que salga de sus instrumentos, pero si os habéis comprado
Sleepaway esperando algo más que corrección, habéis tirado el dinero. Un disco para dormir, para momentos de relax agarrados con un chico o una chica, sentaditos en un sofá, tomando un café y charlando sobre la vida.
La mezcla de ritmos sin altibajos, guitarras de acompañamiento y una voz más de agudos que de graves, aderezado con campanillas en algunas canciones (prestad atención en su tercer corte, “Best Unspoken”) hacen de
Sleepaway un grupo interesante de oír, prescindible de comprar. Un grupo correcto, que no bueno o malo.
Y como ejemplo podéis escuchar la citada “Best Unspoken”, de amor sano, azulito y rosa; “Something on a Saturday”, con un buen estribillo; y la que abre este disco: “Nice Shoes, Hollywood”, que desde mi punto de vista es la más completa, la mejor para abrir boca de algo que te deja con un poco de hambre.