El segundo larga durada de
Silverstein supone un considerable paso adelante respecto a When Broken Is Easily Fixed hablando en técnica y madurez compositiva.
Once piezas que combinan con inteligencia el melodismo más pausado de bandas como
The Get Up Kids con la cara más enérgica y agresiva que puede ofrecer el post-hardcore (salvando las distancias que conllevan las limitaciones de un estilo por momentos más cercano al pop rock que a lo que su propio nombre indica), logrando hacer mella desde la primera escucha.
Your Sword Vs My Dagger abre da muestra de ello con el pegadizo riff de opertura de disco y los melancólicos coros de carácter épico.
Smile In Your Sleep, temazo en toda regla (atención a la segunda guitarra en el estribillo), toma el relevo para hacernos la idea de lo que vamos a encontrarnos en este sólido trabajo. Sólido por los constantes destellos de calidad musical en temas que podrían exponerse como serios representantes en su estilo (tan mal tratado por su sobreexplotación en su cara más comercial), por baladas como la que lleva el nombre del álbum y porque encontramos dos temazos de la talla de Always And Never o Three Hours Back en la recta final, sellada esta con la melancolía esperanzadora de Call It Karma.
En cuanto a la producción (el aspecto más descuidado en su primer disco) cumple aquí a la perfección (voz y batería se benefician especialmente de ella).
Una pena que las líricas no destaquen por su madurez, amén del abuso de temas como el amor o la desolación, que pueden contribuir a cierta sensación de deja vu.
Discovering The Waterfront augura un interesante futuro para
Silverstein, siendo además de un muy buen disco, una prueba de la prometedora evolución que ha experimentado su música.