Kover son un grupo canadiense más o menos veteranos, anteriormente conocidos como ‘Skies At War’. Durante 2005-2006 gozaron de un buen momento del cual brotó su primer disco oficial, titulado Assembly. En este disco, el grupo refleja sus principales pautas de funcionamiento que se resumen en un sonido hardcore/posthardcore tradicional en la línea de grupos como
Samiam. Curiosamente también me recuerdan a
Smoke or Fire o Kut-U-Up, grupo bastante ausente desde que a principios de los 2000 compartisen super-giras con blink 182,
Green Day y
Jimmy Eat World.
Assembly se nutre a base de una combinación de canciones a mitad de acelerar. Es un punkrock muy característico de este tipo de grupos en los que no se acaba de desatar el clímax. Las canciones no acaban de explotar, mantienen una especie de tensión, cierto aire de tranquilidad. Es algo curioso, pero al mismo tiempo acaba contribuyendo a que a mitad de disco te encuentres a ti mismo bastante aburrido.
Kover , esta vez, peca de monotonía. Principalmente destaca la intro al disco, una pieza instrumental que funciona de lujo así como Asphalt and Stone, un temazo, junto al estribillo de Blinded and Alone. Lo más curioso es que a mitad de disco facturan un medio tiempo realmente bueno. It Girl se dibuja como una canción bastane intimista y oscura, con una línea de bajo que roza el dramatismo y que establece la base rítmica del tema, una bonita canción.
Está claro que
Kover no aportan nada nuevo. Assembly es un álbum demasiado plano, demasiado monótono que sólo se destaca en determinados momentos, que goza de un par de temazos, pero que cae demasiado pronto en el tedio para aquellos que busquen algo realmente dinámico. En cambio, es fácil que haga las delicias de los amantes del posthardcore más clásico