Las influencias norteamericanas en territorios europeos en lo que al punk y el hardcore, así como derivados se refiere, ha dado lugar a diversidad de grupos de calidades bastante dispares. Lo que sí es cierto es que Suecia ha sido cuna de sus mejores productos, y desde ese mismo lugar llegan
Parties Break Hearts , enmarcados dentro del algo sobreexplotado género hardcore-rock-metal con toques pop que bandas como Boy Sets Fire lograron llevar a su máximo exponente.
Lo cierto es que sin ser un estilo demasiado variado, ofrece un abanico de posibilidades de las que el grupo que tratamos solo aprovecha algunas.
En el caso de este disco, nos encontramos con unas melodías que son pegadizas pero solo en algunos temas logran transmitir la fuerza necesaria que hace desear volver a escuchar un tema concreto. El tema de apertura, Crape! o Dance, Dance Revolution son ejemplos de lo mejor que ofrece el álbum. Es una lástima contemplar como las guitarras destacan en momentos puntuales como el final de Point Of View, mientras que en el resto se reducen a la simple distorsión. Un poco de variedad en este aspecto se hubiera agradecido, especialmente para definir una seña de identidad para el grupo, pues quizá suena algo genérico.
Por la parte que respecta al vocal, la verdad es que logra compensar algunas carencias a nivel de composición y consigue sostener el conjunto a un buen nivel, alternando partes más melódicas con los gritos de turno.
A pesar de todo, el disco debut de
Parties Break Hearts deja el buen sabor de boca suficiente como para seguir con interés su evolución, ya que con un poco más de experiencia los resultados pueden ser realmente buenos. Life Is To Short To Dance With Ugly People ofrece los alicientes suficientes como para gustar a amantes de este estilo, algo marginado últimamente.