Madina Lake es uno de esos grupos que disfrutaron de un pequeño éxito nada mas salir a la escena, con la publicación de su primer Lp en el 2007, “From Them, Through Us, To You” los de Chicago vieron la cara simpática del mundillo, bastaron 3 o 4 temas pegadizos para que las emisoras de radio y los jóvenes adolescentes americanos les aceptasen en su circulo emo-rock.
Y lo cierto es que su anterior trabajo no estaba nada mal, nada nuevo pero ahí quedan temas como “House Of Cards” o “One Last Kiss” que tardaron bastante en salirse de mi cabeza.
Pero claro, vieron que solo con eso no bastaba para vivir holgadamente de la música y que a pesar del notorio éxito los beneficios les llegaban para gasolina y poco más.
Después de dos años la banda de los hermanos Leone nos traen su segundo trabajo de estudio y por lo aquí ofrecido la formula sigue siendo la misma, guitarrazos entretenidos, letras EMOtivas, sintetizadores y altas dosis de azúcar por todos lados.
El problema que encuentro en este segundo trabajo es que no veo temas realmente redondos y dudo que tenga el éxito de su predecesor.
Y sí, ahí están “Through The Pain”, “Not For The World” o “Welcome To Oblivion” que no están nada mal y que te harán tararearlos unos cuentos días pero no se si será suficiente dada la exigencia actual.
Desde luego han puesto los medios apropiados para buscar el éxito, contratando a David Bendeth, productor de bandas como
Paramore o Red Jumpsuit Apparatus.
Desde luego lo que nadie les puede negar es que son buenos en hacer melodías pegadizas y comerciales y aunque eso parece que esta mal visto hoy en día, no es nada fácil.