Nunca llegaremos a saber cuántas reliquias más hubieran salido de las guitarras de
Much the same de no haberse separado, y digo reliquias porque es lo que tendrían que haber hecho para sobrepasar el nivel de este disco. Y es que Nacidos a finales de los noventa en Chicago, amamantados por bandas de la época como NUFAN,
NOFX ,
Bad Religion o
Lagwagon y sin haber podido disfrutar del reconocimiento que se merecían,
Much the Same no dejan de ser uno de los máximos referentes al hablar de Hardcore melódico.
El disco empieza con “Wish”, un preludio de la que se nos viene encima. Un disco en el que el tema principal son los sentimientos tanto de pareja como de amistad o familia y que se aleja de las letras políticas a las qué nos tienen acostumbrados en este género. Si bien en la primera escucha podemos pecar de pensar que cae en la monotonía, ya con la segunda nos daremos cuenta de los pequeños detalles que hacen único cada tema y que consiguen que te encariñes del disco canción tras canción.“Masquerade” o “Never win” son las más representativas de la velocidad del disco, que aporta un toque de agresividad con “Still Falling” y se suaviza en “Hits home”, una delicia para los melódicos. Pero tranquilos que el disco, aún tratándo de temas de contenido emocional, no cae en sensiblerías sino que habla de la vida misma.
Es por tanto un disco indicado y recomendado para todos los que se quieran reencontrar con el mejor hardcore melódico de los últimos tiempos. Y para todos los que tengan mal sabor de boca al pensar que no podrán disfrutar de su directo, tres años después sacaron “Survive”, otra maravilla donde demuestran su madurez sin perder un ápice de su esencia.