¿Alguna vez has cogido una concha y te la has puesto en la oreja para oír el sonido del mar?, vale, si haces lo mismo con una botella vacía de cerveza no oirás el mar, sino más bien los recuerdos de la fiesta de anoche. Pues bien, de algún modo, así es como suenan
Dear Landlord , a fiesta, a canciones rápidas, alegres, punkrockeras y punkpoperas, pero aceleradas hasta hacerte perder la respiración. Su historia se remonta a 2006, cuando miembros de Rivethead y
The Copyrights decidieron, por distintos motivos, juntarse y crear
Dear Landlord. Ya e puedes hacer una idea del pedigree del grupo.
Pero vayamos al grano. ¿Qué nos encontramos en ‘Dream Homes’?, pues un LP de 14 canciones empaquetadas en poco más o menos que media hora. ¿Te haces ahora una idea de lo que estamos hablando?... Hablamos de rapidez, de melodía, de ganas de decir las cosas como son, de pasarlo bien y de mantener la actitud lo más intacta posible. No hay nada más, punkrock melódico y rápido, muy a lo ‘old-school’, del que no se ve tan a menudo hoy en día pero que brilla por su inmediatez. Ya desde el primer corte ‘I Live In Hell’, que te saca a patadas del sopor, no vas a dejar de moverte al ritmo de canciones frenéticas. Pero es que luego llegarán ‘High Fives’, ‘Lake Ontario’, Landlocked’ o ‘Three To The Beach’, pepinazos melódicos tan redondos como una moneda y con estribillos de los que se te quedan pegados. Además, el juego de dobles voces funciona perfectamente bien.
Aún me sorprende que grupos y discos como estos sigan pasando tan desapercibidos en el mundillo del punkrock, al menos en nuestro país, y que no trasciendan mucho más allá de las fronteras de su estado. Bien, es cierto que no vienen a reinventar nada, pero es que hacer algo de este estilo con calidad no está a la altura de todo el mundo. Si eres fan de grupos como
Screeching Weasel ,
Pinhead Gunpowder y muy especialmente de
The Loved Ones ,
Dear Landlord te van a encantar, no te quepa la menor duda.