Vaya “as” tenían
Mae guardado en la manga. La idea de plantear una trilogía temática como ha sido (m)orning, (a)fternoon y (e)vening era, de entrada, atrayente y sugerente, pero arriesgada al mismo tiempo, y como hemos comprobado, ha tenido sus altibajos, aunque no por ello haya dejado de ser un planteamiento ambicioso. No obstante, y pese al derrape que supuso la anterior entrega, titulada (a)fternoon, (e)vening no sólo viene a levantar cualitativamente el planteamiento global, sino que supera, incluso, el primer EP, que ya nos dejó buen sabor de boca de por sí.
En efecto, (e)vening es la mejor entrega de las tres y, es más, la que más se aproxima a ‘The Everglow’ (2005) en cuanto a sonido en general se refiere, como así lo demuestran canciones como ‘I Just Needed You To Know’ o la preciosa ‘Seasons I. Departure’, a la que le sigue ‘Seasons II. Initiation’ y ‘Seasons III. Return’, enlazándose y creando una especie de suite de piano que, a su vez, genera un continuo de emociones cambiantes con la única utilización de ese instrumento, a secas y a pelo. Magistral. Y una vez aparecido el piano, ya no saldrá de la escena hasta acabar el EP, apareciendo aquí y allá, ayudando a crear el ambiente nocturno que destila (e)vening. Una maravilla que transmite paz, tranquilidad, melancolía e incluso tristeza. La forma en que se han ejecutado las partes de piano me parecen soberbias. No son una exhibición de talento y virtuosismo, sino que, como en otros casos con otros instrumentos, se ha apostado por una base sencilla, un planteamiento simple, pero impregnado de ‘feel’ y emoción, conductor de sensaciones y sentimientos. La clave está en la sinceridad que destila el piano (y todo el EP, en general), algo difícil de explicar hasta que lo oyes.
Mae aquí se exhiben, se lucen, se dejan llevar como nunca y vuelven a demostrar que pueden repetir las maravillas del pasado, sin ningún lugar a dudas.
No es oro todo lo que reluce, porque en parte se hace extraño colocar esta suite de piano en mitad del EP y de piezas eminentemente rockeras, es como si el disco tuviese dos caras, pero mezcladas, como un cruce de intenciones y planteamientos, pero que al mismo tiempo lo dotan de una riqueza chocante. No obstante, el talento y el buen gusto entregado en la bonita y melódica ‘Sleep Well’, que es un continuo crescendo (donde probablemente encontremos la mejor interpretación vocal del EP), o en ‘Good (e)vening’ otra maravilla instrumental acabada con cuarteto de cuerda incluido, borran cualquier posible mínima disonancia o ‘pega’ que podamos encontrarle al EP. Estamos ante una de las mejores y más inspiradas obras de
Mae desde The Everglow, yo no tengo la menor duda, esto supone un pico más en su carrera. Brillante y emocionante.