Es innumerable la cantidad de grupos que hoy en día vienen presentados con un sonido o un aspecto similar a
All time low y con los que las discográficas intentan llevarse su parte del pastel (nunca mejor dicho). Esta masificación de grupos tiene dos desventajas principales, la gente acaba por renegar de todo lo relacionado con el género y grupos que realmente merecen la pena quedan a la sombra de otros que tienen un mayor apoyo mediático. Tras esta pequeña reflexión, no es que pretenda presentar a ‘
A Phoenix forever ’ como la revelación del año, pero tras este disco debut no tendrían que envidiar a nadie dentro de la nueva generación punk popera.
Probablemente, este ‘This is why we can’t have nice things’ sea mucho más digestible que otros discos del momento, ya que, aunque en un principio suenen más ‘modernos’, su sonido se acerca más a grupos como
Hawk Nelson o
The starting line. Es pop punk pasteloso, no hay duda, pero no suena ultra producido y no se empeñan en exprimir las canciones innecesariamente. 10 temas, 30 minutos. Sin embargo, también hay que decir, que ponen todas sus cartas sobre la mesa en la primera mano, quedando una segunda mitad algo más descafeinada.
El disco empieza, como ya empieza a ser común, con un corte presentación que apenas sobrepasa el minuto. Le siguen ‘The band sucks but they’re cool dudes’ y ‘Let it grow’ que, sin grandes florituras y con dos buenos estribillos, nos enganchan rápidamente. Si en estos primeros temas se mueven más en la línea de ‘
Better luck next time ’, en ‘Not alright bro’ , una de las mejores canciones del LP, recuerdan más que nunca a los mencionados
The starting line , cerrando con ‘The way back home’ un gran arranque. ‘Avada Kedavra’ y ‘Sunshine’ siguen apoyándose en estribillos contagiosos para que no nos despeguemos de los cascos y dan paso a ‘Butterflies’, la típica balada sin la que parece que el disco estaría incompleto y que no llama la atención especialmente. Finalmente, cierran el disco con la canción que le da nombre y con ‘Weekendie’, volviendo al estilo, pero no al nivel, previo a ‘Butterflies’.
Si creciste escuchando todos los grupos de pop punk que nos dio la primera mitad de la década del ’00, probablemente encuentres interesante este ‘This is why we can’t have nice things’. Buen debut. Sin pretensiones, sin complicaciones y con estrbillos pegajosos. Imagino que con esta descripción no necesitarás mucho más para imaginar cómo suenan ‘
A Phoenix forever ’.