El último disco de
The Dangerous Summer , "War Paint", puede que sea uno de los discos más emotivos del presente año. Que es difícil encontrar música o bandas que hablen sinceramente en sus canciones es algo que ya sabemos, pero cuando das con una de ellas, el placer es doble. Éste es el caso de la banda de Maryland, un cuarteto que se originó en Ellicott City en el verano de 2006, debutando con un primer EP (“There Is No Such Thing As Science”) que atrajo poderosamente la atención de Hopeless Records en menos de un año desde su formación como grupo. Y fue precisamente en 2007 cuando bajo este sello reeditaron este primer EP bajo un nuevo título, “If You Could Only Keep Me Alive”, incluyendo algunas nuevas canciones. Así, finalmente en 2009 editaron su primer LP, “Reach For
The Sun ”, que supuso el pistoletazo de salida para su agenda de conciertos grandes, incluyendo el festival Give It A Name o, más recientemente, el Warped Tour.
Con este meteórico ascenso nos situamos en Julio de 2011, mes en el que ve la luz su segundo largo en Hopeless Records. Se trata de “War Paint”, una clara apuesta por la sinceridad en las letras y la emoción en las melodías. En cuanto a este tipo de aproximación me traen a la memoria a
Manchester Orchestra , por lo trabajado de sus letras e intensidad de sus bases instrumentales, aunque
The Dangerous Summer se centren más en un tipo de sonido más vinculado con el rock alternativo y, sobre todo, el emo de los años 90. Así, el presente álbum abre con uno de los mejores cortes del disco, que da título al LP, “War Paint”, una auténtica cascada de batería y guitarras que sólo descansan ligeramente para dar cabida a la voz en momentos puntuales. Se trata de una canción que marca, define y resume el espíritu y sonido global del disco, empleando un delicado equilibrio entre la melodía y la agresividad en su justa medida. En esta línea destacan canciones como “Good Things”, "No One`s Gonna Need You More", “Siren” (con un puente que puede ser de lo mejor que ha escrito la banda en toda su carrera), "In My Room" o “Work In Progress”, que muestran las características que hemos mencionado y el carácter de himno e inmensidad que impregna a todo el disco. En una línea más intensa y oscura destacarían temas como “Miscommunication”, "Waves" (que cierra el disco) o “Everyone Left”, que recuerdan musicalmente a
Jimmy Eat World y que en sus letras ahondan en la idea de lo triste que es saber que las cosas van realmente mal, hablando en muchos casos sobre relaciones rotas, aunque no son canciones que suenen estrictamente deprimentes.
“War Paint” es, sin duda, un gran álbum. Rico, denso y emotivo. Probablemente uno de los mejores discos del año en su género, una joya a descubrir por aquellos que no se hayan aproximado a este grupo antes, y una nueva entrega a disfrutar para aquellos que ya les conocieran con su anterior trabajo, “Reach For
The Sun ”. Se trata de un álbum inspirado, desintoxicante para los que lo han compuesto, catártico, de expulsión de demonios interiores, de asimilación de situaciones concretas, de asunción de responsabilidades y de superación personal. “War Paint” es la reafirmación de una identidad, la señal que marca un camino, un paso más en la carrera de
The Dangerous Summer. Un gran acierto.