Avenged Sevenfold están de regreso con un nuevo trabajo discográfico (el sexto de su carrera) que viene a suceder al agridulce “Nightmare”. Se trata del primer disco que han compuesto íntegramente sin la presencia de James Sullivan (The Rev), quien como recordaréis, falleció cuando la banda estaba a punto de comenzar a grabar su anterior LP, habiendo participado en la composición y grabación de las demos del mismo. Así, 3 años después y con la incorporación de Arin Ilejay como batería oficial de la banda, el grupo publica “Hail to the King”, un disco que o bien puede gustarte con todas tus ganas, o bien puedes llegar a odiar hasta decir basta. Todo depende de la época de Avenged Sevenfold con la que te sientas más identificado (y lo ‘talibán’ que llegues a ser en uno u otro sentido) pero sobre todo con lo de acuerdo que estés con el giro estilístico que comenzaron en su anterior entrega. Ahora bien, si eres de los que mantienen las orejas bien abiertas, quizá te lleves más de una sorpresa.

Así, con este nuevo LP, la banda confirma que han sido capaces de sobreponerse (más o menos) a una pérdida como la de The Rev, quien además de ser artífice de las líneas de batería de los anteriores discos del grupo, era un miembro muy activo en lo que a composición de melodías y letras se refiere. Ahora bien, ¿qué tal les sienta la ausencia de The Rev y la incorporación de Ilejay como nuevo batería? Bueno… hay que saber tomársela como lo que es: una pérdida irreparable para el grupo que supone la dificultad añadida de tener que ocupar un puesto que le puede venir muy grande a cualquiera y que por lógica va a desembocar en ritmos o bases rítmicas bastante diferentes en comparación a las que The Rev nos tenía acostumbrados (de hecho, incluso hubo quien despotricó del señor Mike Portnoy cuando grabó y giró con el grupo, que ya tiene tela el asunto). No queremos decir con esto que Ilejay haya hecho un trabajo mediocre, no puede ser un batería mediocre si ha sido capaz de aprenderse e interpretar (con diferencias, claro está) el repertorio de la banda, pero en términos de composición es muy distinto a Sullivan, porque cada uno tiene su propio estilo, y eso se nota en una banda que, precisamente, de lo que más podía alardear era de su sección rítmica, capitaneada por The Rev. En términos de sonido, el grupo se ha acercado mucho a lo que venían pregonando en las primeras entrevistas concedidas con motivo de la publicación de este LP: seguir la senda de formaciones tan clásicas dentro del metal como Metallica , Iron Maiden, Guns ‘n’ Roses, AC/DC e incluso Velvet Revolver. Así de simple y complejo al mismo tiempo. Y lo cierto es que “Hail to the King” es el disco que más se aproxima a este objetivo. Mientras “Nightmare” mostró una clara intención de virar hacia un sonido más clásico, en esta nueva entrega las intenciones no sólo se confirman sino que se concretan en giros, melodías, riffs (“Doing Time”) y, sobre todo, solos de guitarra por doquier ejecutados con gusto, clase y elegancia (gentileza de Synyster Gates), que van a recordarte en más de una ocasión a los grupos que hemos mencionado unas líneas más arriba. Así por ejemplo, “This Means War” es todo un homenaje (plagio dirán otros) a “Sad But True” de Metallica , así como “Heretic” (mucha atención al solazo del señor Gates), pero encontrarás también referencias explícitas a Iron Maiden en cortes como “Coming Home”.

En definitiva, se trata de un trabajo que tiene muchas cosas buenas pero también algunas no tan buenas. Por un lado, la maestría del señor Gates a la hora de componer riffs y solos inspiradísimos; y por otro, lo mucho que se echa de menos a James Sullivan a las baquetas (y lo que no son baquetas). No obstante, en este álbum se pueden encontrar algunas canciones interesantes, y el resultado global mantiene una dignidad que muchos ya pusieron en entredicho en “Nightmare”. Si eres fan del hardrock, metal y heavy metal más clásico y sobre todo de bandas como Metallica y compañía, no te lo pienses ni un segundo. “Hail to the King” te va a sonar a gloria.